Atendiendo a legalidad, los canales autonómicos se verán en comunidades colindantes con características culturales similares. Básicamente se entiende por características culturales similares la utilización de un mismo idioma, y dejando de lado polémicas absurdas, catalanes y valencianos hablamos el mismo idioma.
Sin embargo, desde la Generalitat valenciana cuando ven acercarse las elecciones se apresuran por acabar con repetidores “ilegales” que hacen llegar la señal de TV3 a nuestras casas y sancionan iniciativas culturales que buscan la reciprocidad de la señal en ambos territorios.
Creo que la Generalitat Valenciana teme la repercusión política que pueden tener los mensajes que llegan desde TV3. Contra esto a la Generalitat sólo se le ocurre lo de siempre, manipular allá donde pueda y cerrar todas las bocas que le incomoden.
Como valenciana llevo tiempo avergonzada por un gobierno corrupto cuyo departamento de comunicación se llama Canal Nou, pero lo tenía fácil, ni siquiera sé si tengo este canal sintonizado en mi televisión, no me interesa. Pero que decidan que no puedo ver algo a lo que legalmente tengo el derecho me llena de rabia. Por eso creo que es importante hacernos oír el próximo 16 de Abril en la manifestación por la libertad de expresión en Valencia.
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